El primer ‘road trip’ con Apolo

Si tienes mascotas y estás en el área de WA, Olympia es un lugar que puedes visitar.

En el mes de febrero estuve planificando nuestro primer ‘road trip’ con Apolo , pero todo se complicó y tuve que cancelar. Unas semanas después surge este nuevo plan de visitar por segunda vez a Olympia, la capital de WA. Me pareció buena idea un ‘road trip’ corto para ir probando cómo Apolo va manejando el estar en el carro por más tiempo de lo acostumbrado y Olympia nos queda a 1 hora y media desde nuestro apartamento, también lo vi perfecto para probar el quedarnos fuera del ambiente normal para Apolo por una noche.

La aplicación que siempre utilizo para reservar estadías es Booking, hasta hoy ha sido de mis herramientas preferidas y no he tenido situaciones que lamentar, lo que te muestra Booking es lo que encontrarás, o al menos esa ha sido mi experiencia. En esta ocasión busqué lugares para quedarnos en Olympia que fueran Pet Friendly, conseguí varios pero me decidí por un hotel que ya habíamos probado anteriormente sin Apolo, para irme un poco más a la segura, este fue el Hilton Garden Inn, Olympia. Tuvimos una excelente estadía con Apolo en este lugar, solo que encontré el pet fee costoso $75.00, por lo general no pasa de $30.00 en las hospederías. Te recomiendo preguntar cuando haces la reservación por el costo de pet fee, en Booking la mayoría de las veces no aparece visible, así te evitas sorpresas.

Los sábados son ahora días de entrenamiento para Apolo. Tan pronto salimos de sus clases, a eso de las 3:30 de la tarde, seguimos a nuestro destino. De camino hicimos una pausa para almorzar y darle la oportunidad a Apolo de hacer sus necesidades. A eso de las 5:30 p.m. ya estábamos entrando a Olympia, aún estaba de día. Nos estacionamos y nos bajamos a caminar por el puerto y el tablado de esta área. Se apreciaban las montañas con nieve a lo lejos, las personas en sus barcos, los niños jugando aprovechando el sol de este fin de semana. Algo que ocurre en esta parte del mundo es que después de un largo invierno de lluvia y nublado, el sol se aprecia mucho más y cuando sale no hay tiempo que perder.

Aprovechamos para seguir entrenando a Apolo mientras caminamos, aún se distrae fácilmente, se le quiere trepar a las personas y hala la correa, entonces la idea es convertir en entrenamiento cada oportunidad que estamos afuera. De esta manera lo llevamos con nosotros a conseguir ese cafecito de la tarde y encontramos un lugar súper chulo que se llama Rhythms Coffee. Irael pidió un matcha latte frío, yo un latte normal, y Ariel pidió un latte normal pero también un latte con china y especias, todas las bebidas estaban divinas. Le añado que su espacio afuera es perfecto para cuando estamos con mascotas, te puedes sentar con ellas y disfrutar de tu café, si el clima te lo permite y este día el clima estaba perfecto.

Tengo que decir que Apolo lo hizo muy bien, en todo momento estuvo tranquilo, observando las personas y otros perritos. Si pude darme cuenta que el sol que estaba entrando le provocó mucha sed, pero lo bello de estas ciudades pet friendly es que le ofrecen de todo a ellos, como por ejemplo; un platito de agua para el perro mientras tú consumes en el establecimiento.

Te adelanto que veinticuatro horas no dan para visitar Olympia y todo lo que tiene para ofrecer, así que mi recomendación es estar al menos dos noches y tres días para poder conocer más.

Saliendo del café nos encontramos con un atardecer que no veíamos hacía meses, nos paramos simplemente a observarlo. Hay momentos que reciben otro valor cuando te das la oportunidad de vivir en otro lugar del planeta, este es uno de esos momentos. Seguimos caminando de vuelta a nuestro carro, Irael tenía hambre y quería de un lugar específico que ya habíamos probado anteriormente cuando visitamos Olympia por primera vez en el 2022 y nos dejó enamorados, se llama Mercato Ristorante, sus platos italianos son deliciosos. Esta vez pedimos todo para llevar porque nos sentíamos cansados y aún nos quedaba hacer check in en el hotel y acomodarnos.

Llegamos al hotel, bajamos todo, nos acomodamos, comimos, le dimos de comer a Apolo y lo sacamos para que hiciera su último potty del día. Apolo comenzó a verse ansioso, estaba oliendo todo, nos miraba asustado, eran las 8:30 de la noche, su hora de dormir, y no encontraba su espacio. Intentamos todo para que durmiera, no quería en la cama, ni en el piso, ni encima de su frisa y así estuvo hasta la 1 de la madrugada, hasta que el sueño lo venció. Fue una larga noche.

Al día siguiente

Ocho de la mañana y nadie podía abrir un ojo, ni nosotros ni el perro. Es hasta gracioso como nos ha cambiado la vida, es como tener un bebé nuevamente en casa. De todos modos me puse de pie, me arreglé, levanté a todos para prepararse e irnos a desayunar. Este hotel ofrece buen desayuno, no lo incluía pero decidimos comer allí mismo para no tener que ir en búsqueda de un lugar y arriesgarnos a que estuviera lleno por ser domingo. Definitivamente fue la mejor idea, desayunamos con calma, en un espacio donde Apolo podía estar, recibió mucho amor de las personas que estaban allí y bueno, se aprovechó de los pedazos de tocineta que caían al piso «accidentalmente»😁.

Recogimos todo, hicimos el check out y nos fuimos directo al WA Capitol Building Campus. Encontramos estacionamiento en sus alrededores a $4.00 por 3 horas, suficiente tiempo para explorar esta área de Olympia. En este lugar se encuentra el Washington State Capitol, con una estructura impresionante que puedes ver desde que vas entrando a la ciudad. Esta vez pudimos visitar el interior de este edificio y caminar por sus pasillos. Si por fuera impresiona, sus detalles por dentro te dejan sin palabras.

En este campus también se encuentran otros edificios históricos y gubernamentales, entre ellos la mansión del gobernador, que también tiene una estructura bellísima con un jardín que da gusto. Desde este punto hay una gran vista al mar, a las montañas y a la ciudad de Olympia. Aquí estuvimos alrededor de 2 horas y decidimos movernos al pueblo para ir a caminar por las tiendas y ver qué encontrábamos.

Ya eran cerca de la 1 de la tarde y fuimos al café del día anterior, Rhythms Coffee, nos tomamos un latte y conversamos un rato mientras Apolo nos esperaba pacientemente. Una vez terminamos nos fuimos a caminar. Unos pasos adelante nos encontramos con la tienda de chocolates Bitter Sweet, que ya habíamos probado anteriormente, sus chocolates no decepcionan. Bitter Sweet permite mascotas adentro, así que entramos y lo primero que hizo la persona que atiende fue ir a saludar a Apolo y preguntarnos si le podía dar un «treat», le dijimos que sí, Apolo inmediatamente se sentó a esperarlo. En esta tienda escoges tus chocolates como si estos fueran joyas, tienen una vitrina hermosa con variedad de sabores y tu haces tu caja con los que gustes y la cantidad que decidas.

El hambre estaba comenzando a sentirse, busqué opciones de restaurantes que fueran pet friendly en el área, para mi sorpresa había muchas opciones. Escogimos Row por su menú y porque tenían patio exterior, eso me hacía sentir más cómoda por si Apolo se inquietaba por ser su primera vez en un restaurante, pensé que esto nos permitiría atenderlo y sentir menos estrés si se salía de control. Nos sentaron en aproximadamente 20 minutos y lo primero que hicieron fue servirle agua a Apolo. Tengo que decir que comimos muy bien, buena calidad y el trato bien bonito. Apolo lo hizo excelente y no tuvimos mayores contratiempos mientras estuvimos comiendo.

Se hicieron las tres y media de la tarde y Apolo se veía cansado, por lo general duerme bastante durante el día. Nos fuimos al carro para que tomara su siesta. Una vez en el carro decidimos entonces regresar a casa pues con la hora y media de viaje estaríamos llegando cerca de las seis de la tarde y al otro día había clases y trabajo.

El cometido se cumplió, no era el de visitar muchos lugares, era el de exponer a Apolo a su primer road trip y nuevas experiencias para así comenzar a acostumbrarlo para los próximos que vendrán, también para ver qué mejoramos para el próximo. Sin duda alguna, si tienes mascotas y estás en el área de WA, Olympia es un lugar que puedes visitar con ellos sin grandes problemas.

Espero que disfrutes leyendo estas aventuras, te abrazo;

Betsy ✨


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